La Manzana Jesuítica de Córdoba es un conjunto histórico y monumental de incalculable valor, construido durante el siglo XVII, cuando Córdoba pertenecía a la provincia jesuítica del Paraguay. Los jesuitas se establecieron en esta zona en 1599, y Córdoba pasó a ser el punto central de las tareas productivas y de evangelización de la Compañía de Jesús.
Primeramente se construyó la Iglesia Principal de la Compañía de Jesús, el Colegio Máximo y el Convictorio, a partir de los cuales se comenzaría a desarrollar la labor espiritual y educativa, dando origen a la Universidad Nacional de Córdoba y al Colegio Nacional de Monserrat.
La Manzana Jesuítica de Córdoba se sitúa actualmente en pleno centro histórico de la ciudad. En ella se condensan algunas de las máximas expresiones del arte barroco en Latinoamérica, como es el caso de las bóvedas pintadas y los retablos de la Iglesia y la Capilla Doméstica. Todo el conjunto fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2000.
Como parte del Camino de los Jesuitas en la región, se puede recorrer el “Camino de las Estancias Jesuíticas”; un itinerario turístico cultural que permite conocer las cinco estancias jesuíticas declaradas patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO: